La Concejalía de Accesibilidad ha dado respuesta a la petición realizada -hace escasamente dos meses- por un vecino del Casco Histórico para la instalación de dos tramos de escaleras en el Miradero que constituyan un apoyo y sujeción para personas mayores o con movilidad reducida, ya que pese a existir un tramo de escaleras mecánicas en el mismo punto, éstas “en ocasiones, se paran”.
“Este vecino nos manifestó la necesidad de adecuar la zona para beneficio de personas mayores o con alguna dificultad para subir. Por este motivo, los herreros municipales han instalado en los últimos días sendas barandillas, de unos cinco metros de longitud cada una, adecuadas al espacio y entorno en el que se encuentran”, ha expresado Puig.
La edil y el vecino que tramitó la petición han supervisado el estado final de la actuación, realizada por operarios municipales, y han podido comprobar de primera mano “cómo una medida simple, en ocasiones supone una respuesta importante para mucha gente que presenta dificultades de movilidad”, ha dicho la edil.