Cuatro vecinos de Añover de Tajo están siendo investigados por la Guardia Civil, que ya ha instruido las pertinentes diligencias, por un supuesto delito contra la flora y la fauna.
Según se informa desde el instituto armado, el pasado 31 de octubre una llamada alertó de la presencia de un vehículo con furtivos en el coto de caza de Villanueva del Aceral (Ávila).
Aprovechando el operativo de la ‘Operación Tenazón’ se puso en marcha un dispositivo de localización y seguimiento tanto por tierra como por aire para así interceptar al todoterreno. Tras parar al vehículo, conocido por los vecinos del lugar así como por la Guardia Civil por ser un asiduo de la zona, se pudo observar que llevaba en su interior a cuatro ocupantes, cinco galgos y tres liebres muertas que sospecharon que acababan de ser cazadas. Además, los galgos no estaban vacunados debidamente y uno de ellos no poseía microchip.
Así, la Guardia Civil procedió in situ a la investigación de los cuatro individuos, todos ellos vecinos de Añover de Tajo, así como la aprehensión del vehículo como instrumento para la comisión de los delitos, los cinco galgos, y las tres liebres como prueba del delito.
Además, el conductor del todoterreno también fue puesto a disposición judicial tras ser identificado por conducir un vehículo a motor habiendo perdido la vigencia del permiso de conducción por la pérdida total de puntos. La operación continúa abierta sin descartarse nuevas detenciones.