Desde que en junio de 2016, a raíz del destrozo de la Fuente de los Patos, el alcalde de Talavera anunciara e iniciara el proceso burocrático para instalar cámaras de videovigilancia en los Jardines del Prado para disuadir e identificar a los vándalos que causan daño en los mismo, el Gobierno Municipal no había vuelto a hablar de esta medida hasta hoy.
La portavoz del Ejecutivo, María Rodríguez, ha trasladado que en la última reunión de la comisión de seguimiento del Plan Especial de La Villa, celebrada el lunes, el Gobierno al que representa propuso la instalación de cámaras, pero sólo en el pórtico de la Basílica.
Una medida que, según ha afirmado, persigue “concienciar del valor del patrimonio histórico y cultural” que representa esa cerámica que data del siglo XVI y que compone los dos zócalos que se hallan a ambos lados de la puerta principal del templo.
Otra de las opciones que se barajaban para preservar la cerámica del pórtico de la Basílica, una vez que haya sido restaurada, era el cerramiento con forja de todas las arcadas, aunque Rodríguez ha indicado que esta opción no la parece adecuada “porque se estaría quitando algo que es de todos los talaveranos”.
En ningún caso se barajan colocar otras cámaras en otros lugares del parque, pese a que contarían con el pertinente y preceptivo permiso de la Delegación del Gobierno.
Cabe recordar que en un principio se habló de cerrar los Jardines del Prado por la noche, una opción que se desechó puesto que las cámaras podrían conseguir el mismo efecto sin privar a los talaveranos de su disfrute a su libre alvedrio. Sin embargo, ahora parece que ni una cosa ni otra.
