Triple puerta grande en la tradicional corrida de toros de la Fiesta del Olivo en la localidad toledana de Mora. Se lidió un encierro de la ganadería toledana de Alcurrucén que dio buen juego en líneas generales para la misma terna que lidió hace unas semanas la corrida de Conde de Mayalde en la Plaza de Toros de Toledo. Una terna compuesta por Eugenio de Mora, Toñete y Ángel Téllez.
Una terna donde destacó y fue el máximo triunfador de la tarde dominical, el moracho Ángel Téllez, que cortó cuatro orejas y un rabo a su lote y puso la plaza de toros patas arriba.
Eugenio de Mora
Con una tarde muy calurosa y una muy buena entrada de aproximadamente tres cuartos de entrada, inició la faena Eugenio de Mora ante el primero de la tarde. El moracho cuajó una buena faena ante el noblón de Alcurrucén, donde comenzó con un inicio de rodillas.Eugenio dio varias series de derechazos con la muleta y estuvo con pases de pecho de mucha autoridad. Se vio emborronada su faena con los aceros donde se atascó con la espada y pinchó en más de una ocasión, perdiendo así las opciones de triunfo y quedándose únicamente en ovación con saludos tras estar bastante notable el toledano con el animal.
El segundo de su lote que hacía de cuarto de la tarde fue mansón. Eugenio supo dar con las teclas necesarias que pedía el animal y acabó haciéndole bueno. Sacó diversas tandas que llegaron a calar en los tendidos y mató con una estocada precedida de un pinchazo para cortar dos orejas generosas por parte de la presidencia.
Toñete
Toñete toreó con temple y haciéndole muy despacio las cosas a los animales de su lote. El primero le requirió mucho temple y hacerle las cosas despacio con la muleta. Toñete le cuidó lo máximo posible y a pesar de ello, el toro no duró apenas en la muleta y terminó rajándose. Sacó algunos naturales sueltos y estuvo desafortunado con los aceros donde pinchó en varias ocasiones, fue ovacionado.
Con el segundo de su lote y tras saber que sus compañeros saldrían por la puerta grande si o si, Toñete no quiso ser menos.
Ante un animal feote de tranco y de embestida, a lo que se le sumó malas ideas cada vez que este le echaba la muleta, pegó un arreón y le exprimió al máximo. Arrimón final ante el de Alcurrucén que hizo responder al público.
Pinchó de primeras matando posteriormente con una estocada caída, para cortar dos orejas generosas y acompañar a sus compañeros por la puerta grande.
Ángel Téllez
Ángel Téllez fue la gran sensación de la tarde y ya no es casualidad. El moracho gusta y tiene una personalidad tremenda en su toreo. Sin lugar a dudas, Ángel quiere ser figura del toreo y lo está demostrando poco a poco.
Fue el máximo triunfador de la tarde tras cortar cuatro orejas y un rabo a su lote y cautivar al público presente con su toreo de arrojo y ajustado, tanto con la capa como con la muleta.
Con el primero de su lote, Ángel hizo una faena de las que ya nos tiene acostumbrados. Se hizo el silencio en la plaza y Téllez se echó el capote a la espalda para pasarse al de Alcurrucén por delante y por detrás, con manoletinas muy ceñidas. Puso en pie a la plaza.
La faena con la muleta la cuajó al natural ante un buen animal de Alcurrucén que acudió en todo momento a la muleta del moracho cada vez que este se la presentaba en la cara. Téllez se gustó y estuvo muy a gusto en todo momento con el animal. Remató la faena con manoletinas ajustadas y mató con un estoconazo en todo lo alto, para desorejar al animal.
Con el sexto y último de la tarde, llegó el colofón final por parte de Ángel Téllez. Nadie contaba con este final ante un animal que se rajaba en todo momento. Téllez apostó por él y lo dio todo en todo momento. La faena comenzó a coger vuelo y dio naturales muy ajustados acompañado de pases de pecho con poderío.
Remató la faena nuevamente con manoletinas muy ajustadas y volvió a poner en pie la plaza. No conforme con eso, volvió a dar otro estocadón, para cortar en esta ocasión dos orejas y un rabo. El primer rabo en su carrera como matador de toros.
