La candidatura para que la cerámica de Talavera de la Reina y El Puente del Arzobispo, y por extensión de las localidades mejicanas de Puebla y Tlaxcala, no encontró el respaldo unánime del Comité Intergubernamental de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial.
En total, esa declaración impulsada por la asociación talaverana Tierras de Cerámica recabó el beneplácito para su inscripción en la lista patrimonial de 19 de los 24 países con derecho a voto. Entre los cinco opositores, Italia y Austria tras la negativa de España a apoyar su candidatura por la trahumancia de la que también formaba parte Grecia.
“Arrogancia”
En este sentido, el embajador delegado permanente de España ante la UNESCO, Juan Andrés Perelló, ha manifestado que parte del comité evaluador mostró “arrogancia” antes de desvelar la decisión.
También ha apuntado que “sabemos que a algún país le ha costado más entender”, y enfatizado que “los ceramistas de Talavera y Méjico hacen algo más que modelar el barro”.
En esa línea de defensa asimismo ha señalado que “cuando alguien compra cerámica, compra una tradición. Lo que pintan es un manantial de imaginación permanente”, ha concluido el embajador.
Finalmente, el comité valoró esa pervivencia de los talleres de Talavera de la Reina, El Puente del Arzobispo, Puebla y Tlaxcala que han heredado y perpetuado la actividad alfarera tradicional, que se extendió por toda la península y llegó a México a finales del siglo XVI, gracias a una familia talaverana que cruzó a América.