El equipo sagreño volvió a demostrar en el municipal illescano que ha recuperado sus dotes ofensivas. Ricky dejó claro que es un auténtico matador. Primero, al inaugurar el marcador, en el minuto 4, al cabecear un centro de Lomas; y, después, antes del descanso rematar de cabeza al larguero un centro de Otero.
Raúl –desde fuera del área-, Lomas –en jugada personal- y Castañeda, en el descuento, protagonizaron la goleada para los de Migueli. El Villacañas, en esta ocasión, no mostró su peligrosa cara como forastero, siempre se vio desarbolado por un Illescas que quiere salir de los puestos de descenso.
Ambos equipos despiden el año inmersos en la zona peligrosa y tendrán que seguir remando para poder continuar la próxima campaña en este grupo XVIII de la Tercera división.