Los trabajadores de Geacam celebran el próximo lunes, 24 de mayo, la primera jornada de huelga convocada por los sindicatos UGT y CCOO para exigir dar marcha atrás a los recortes en personal y en medios y la negociación de un convenio colectivo (el actual lleva nueve años caducado), que dé una solución a la alta conflictividad laboral de este colectivo.
La primera jornada de huelga tendrá lugar el lunes 24 en Guadalajara, ciudad en la que delegados y delegadas de UGT y CCOO se concentrarán de 11:00 a 13:00 horas frente a la Delegación de Presidencia y Administraciones Públicas (calle Juan Bautista Topete, 1-3), siendo la atención a los medios a las 11:00 horas.
Según la nota sindical, “el Gobierno regional ha recortado desde el año 2019 los medios en Geacam en un 40 por ciento. Si en 2019 había 155 medios de extinción, el próximo 1 de junio la campaña de extinción se iniciará con tan solo 45 medios”.
UGT y CCOO sostienen que estos recortes no hacen otra cosa que poner en riesgo tanto a los trabajadores y trabajadoras de Geacam (Empresa Pública de Gestión Ambiental de Castilla-La Mancha), como al propio medio natural. Por este motivo, piden al consejero de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero, que recapacite y haya una vuelta a la normalidad.
Personal en fraude de ley
Ambos sindicatos denuncian que “es común en Geacam el personal en fraude de ley; la reducción de la campaña de extinción; la no contratación de personal tras las jubilaciones; una plantilla envejecida; interinos cuya contratación se eterniza; la realización de trabajos por medio de contratos de menor categoría; el aumento de personal directivo; o el reparto de pluses de forma aleatoria”.
A ello suman un convenio colectivo caducado desde 2012. Lamentan, igualmente, “las sucesivas mentiras vertidas por la compañía sobre los trabajadores y trabajadoras”. En este sentido, defienden que por parte de los trabajadores siempre ha existido una predisposición clara a la negociación, siendo totalmente falso que -como sostiene Geacam- se hayan negado a colaborar.
Al respecto, aseguran que “estos trabajadores y trabajadoras ya se han cansado de esperar, de no tener un convenio que recoja la realidad de la empresa y de tener una alta conflictividad laboral que deriva en un mal ambiente de trabajo. Están hartos de recortes en campaña de extinción y de una tasa de reposición que lleva dos años sin salir, lo que repercute mucho en los interinos”.
