El Ayuntamiento de Toledo ha abierto este lunes, en la sede electrónica del Consistorio, el plazo para participar en el Plan de Empleo del Gobierno de Castilla-La Mancha, que incluye 315 puestos de trabajo en la ciudad.
A las personas que accedan al plan de empleo se les hará un contrato a tiempo completo, que tendrá diferente retribución y duración con arreglo a la categoría del oficio desempeñado, según ha explicado en rueda de prensa el concejal de Empleo y Promoción Económica, Francisco Rueda, que ha explicado que los interesados se inscriban ahora aunque la contratación no se produzca hasta el mes de septiembre o el de octubre.
Además, ha indicado que los empleos ofertados son para proyectos de obra de remodelación de espacios urbanos, de jardinería y de pintura, que Rueda no ha detallado, aunque sí ha adelantado que los contratos serán de ocho meses, y un sueldo de 1.500 euros brutos para el puesto de coordinador, de seis meses y 1.333 euros para el de operario cualificado, y de seis meses y 1.298 euros para el operario en funciones básicas.
Rueda ha señalado que podrán optar a estos puestos los desempleados inscritos en la oficina de empleo de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, como demandantes de empleo no ocupados y que en el último año y medio hayan trabajado como mucho seis meses de forma ininterrumpida o con diferentes contratos.
Personas entre 30 y 65 años
El plan de empleo está dirigido a personas de entre 30 y 65 años que no perciban prestación retributiva, autónomos desempleados, aquellos que convivan con un dependiente y toda la unidad familiar esté desempleada y los que dejaron su trabajo para cuidar a una persona dependiente, mientras que los menores de 25 años y los mayores de 65 solo podrán participar en el caso de que pertenezcan a un colectivo vulnerable, estén en riesgo de exclusión social o tengan alguna responsabilidad familiar.
El 55 por ciento del total de contrataciones está reservado a mujeres y aquellas que hayan sufrido violencia de género tendrán prioridad para entrar, un 25 por ciento se reserva para colectivos vulnerables en riesgo de exclusión social y un 15 por ciento para discapacitados con un grado igual o superior al 33 por ciento.
Solo se admitirán una persona por unidad familiar y priorizarán según los criterios de antigüedad de desempleo, el grado de discapacidad, la renta per cápita familiar y antepondrán a quien no haya participado en planes anteriores “para que todos tengan acceso a un trabajo y a una renta”, ha dicho el concejal.
