La atleta toledana Irene Sánchez-Escribano confirmó este miércoles que “una fractura diafisaria del segundo metatarso del pie izquierdo” le apartará de los Juegos Olímpicos de Tokio.
A través de una publicación en sus redes sociales, Sánchez-Escribano ha explicado que, durante el entrenamiento, sintió “un chasquido en el pie, repentino, sin previo aviso” y que en la radiografía de este miércoles “se ve una fractura diafisaria del segundo meta del pie izquierdo”. “Eso es lo que tengo. Así que, adiós Tokyo 2020 y adiós Juegos Olímpicos”, ha lamentado.
Irene Sánchez-Escribano era una de las dos atletas españolas clasificadas para la prueba de 3.000 obstáculos femenina, junto a Carolina Robles.
Lleva muletas
“Nunca he sufrido de esa zona, no es una lesión que me haya dado tiempo a cronificar o asumir como mía. Simplemente, estaba corriendo en liso, sin vallas y mi pie izquierdo dijo basta. Sentí un “clac”. Después no he podido volver a plantarlo, desde ayer llevo muletas”, ha relatado.
Sánchez-Escribano ha afirmado que este percance “es una gran putada” ya que se despide del sueño olímpico “a un semana de viajar a Japón”. “Pero el deporte es así. Me lo he pasado muy bien preparándome para estar en la forma en la que estoy, que es la mejor de mi vida. Y con eso me quedo”, ha apuntado.
“A curarme y a seguir, que como os podréis imaginar ya he llorado suficiente. Y aún me quedan lágrimas. Gracias por el apoyo siempre”, concluye su mensaje.