Puerta grande para Jesús Mejías y para Daniel Barbero en la novillada picada que ha tenido lugar en la tarde del lunes en localidad toledana de Almorox.
Interesante y seria novillada de Toros de Brazuelas para una terna formada por Alfredo Bernabéu, Jesús Mejías y Daniel Barbero.
Interesante por el juego de los novillos, donde destacaron el tercero y el quinto de la tarde, que fue premiado con la vuelta al ruedo.
Alfredo Bernabéu
Abrió la tarde Alfredo Bernabéu ante un novillo que tenía poco dentro y poco fondo. Faena muy en tablas y sin apenas emoción en los tendidos, muy fría, abriendo plaza. Mal con los aceros donde pinchó y mató posteriormente con una estocada caída.
El segundo de su lote, cuarto de la tarde, tampoco el suyo. Se vio una lidia muy desordenada por parte de su cuadrilla y acabaron haciéndole brusco al cuarto de la tarde.
Un animal que no tenia malas intenciones y que acabaron haciéndole brusco en la muleta. Nuevamente silenciado en su animal.
Jesús Mejías
Jesús Mejías mostró dos caras y dos versiones muy diferentes en la tarde de hoy. Muy verde en su primer animal y muy bien, con el quinto de la tarde, que fue el más serio de toda la novillada.
Quizás los nervios, las prisas o el no saber estar delante de la cara, le pasaron factura a Mejías en el segundo de la tarde. El novillo tampoco ayudó por su parte que marcó claramente los terrenos y estuvo muy reservón durante la faena. Mejías nunca supo entenderse con el animal y estuvo desastroso con los aceros donde se atascó y entró a matar en varias ocasiones.
Mucho mejor con el quinto. El animal más serio. Mejías cuajó una gran faena de principio a fin y lo rubricó con una gran estocada que le valdría las dos orejas. Tiro de corazón con ganas y hambre y se puso entre pitones para plantarle faena al natural al “astifinísimo” animal de Toros de Brazuelas. El novillo fue de menos de menos a más y cada vez queriendo embestir de mejor manera. Sin comerse a nadie. Mejías le entendió, le aprovechó y triunfó con el. Por su parte, el novillo fue premiado con la vuelta al ruedo.
Daniel Barbero
Daniel Barbero dejó la faena más aseada y de mas bella factura al tercero de la tarde. A pesar de que este no fue premiado con la vuelta al ruedo, fue otro gran novillo. Barbero le cuajó de principio a fin toreándole muy suave y con despaciosidad al natural. El novillo embestía francamente bien y con una embestida al ralentí. Barbero dejó un aroma muy bueno con torería y sutileza por abajo. Asentado y aseado. Mató de una gran estocada.
Con el sexto y último que cerraba plaza, poco pudo hacer. No fue una faena vistosa, pero si de pundonor y valentía. El sexto que no tenia ni un pase, le saco todo lo que pudo a base de ponerse entre pitones y buscando la colación en la cara del animal. Se tiro a matar con todo pero la espada acabó escupiendo fuera y todo se diluyó, quedándose sin poder tocar pelo de nuevo.