El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado el visto bueno a un nuevo decreto que regula las condiciones básicas de los centros de mayores, entre cuyas novedades se encuentran que habrán de reservar el 50 % de habitaciones individuales, contar todas con enfermería, despacho médico las medianas y grandes, y además, podrán ofrecer servicios como los de comida a domicilio, lavandería, fisioterapia o podología a los mayores de la zona.
La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha informado de este decreto en su comparecencia ante la prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, donde ha explicado que los proyectos de nuevos centros o los que hagan reformas o ampliaciones ya contemplarán estas novedades, mientras que los que ya están operativos contarán con un tiempo de transición para ajustarse a las nuevas condiciones.
Con este decreto por el que se actualiza la orden de 2021, ha señalado la consejera, la región se adapta a los nuevos tiempos y las necesidades surgidas a raíz de la pandemia de coronavirus, así como a la nueva normativa.
Además de esa reserva mínima de la mitad de las habitaciones individuales y la zona de enfermería, las residencias grandes y medianas (más de 45 residentes) deberán contar con un despacho médico; y también la ratio actual de un gerocultor por cada seis residentes se rebaja a cinco residentes, sean o no dependientes, aunque los centros públicos ya la cumplen y la mayor parte de los privados, ha indicado la consejera.
El decreto
El decreto, ha continuado, recoge la características técnicas, arquitectónicas o de gestión que deberán cumplir las residencias de mayores, para garantizar el bienestar, la seguridad y la accesibilidad.
Se implantará un sistema de medición de la calidad, ha comentado la consejera, que ha añadido que el decreto recoge las aportaciones de colectivos y personas y que entrará en vigor a los tres meses de su publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha.
Ha resaltado que Castilla-La Mancha ocupa el segundo puesto de las comunidades autónomas en cuanto a la extensión de su red de plazas residenciales para personas mayores, con más de 27.000 plazas autorizadas.
