El Carpio de Tajo y parte de su comarca está viviendo unas jornadas de luto porque a media mañana de este jueves recibirá cristiana sepultura uno de su vecinos A.B.V., de 54 años de edad, que murió en la madrugada del miércoles al intentar apagar el fuego que se produjo en su propia granja de pollos, situada en esta población.
Además, su esposa M.M.R.L., también de 54 años de edad, tuvo que ser atendida por una crisis de ansiedad y el alcalde de la localidad y amigo de la víctima, Germán Jiménez, fue trasladado al Hospital Virgen de la Salud de Toledo al resultar afectado por inhalación de humo.
El fuego comenzó unos minutos antes de la una de la madrugada y parece que fue originado por una estufa que se encontraba en la nave para dar calor a los pollos. El fallecido intentó apagar las llamas con un extintor y fue achicharrado por ellas, pues los bomberos sacaron el cuerpo carbonizado.
El alcalde intentó salvarle
La mujer del fallecido llamó a su amigo y alcalde Germán Jiménez y éste entró en la nave pero no pudo ver a A.B.V, lo que sí hizo fue intoxicarse con el humo; por lo que fue trasladado al centro hospitalario toledano para recibir oxígeno desde las dos de la madrugada hasta las seis.
La nave está situada en la avenida de Valdecarriches de Carpio de Tajo y en el operativo participaron los bomberos de Santa Olalla, la Guardia Civil, el médico de urgencia y dos ambulancias de urgencia.
