La Audiencia Provincial de Toledo juzgará este miércoles a un interno en el centro penitenciario de Ocaña, que quiso introducir 14,66 gramos de heroína en la prisión a la vuelta de un permiso, que había ocultado en la cavidad anal.
Según se indica en el escrito de calificación inicial de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Efe, los hechos ocurrieron el 1 de octubre de 2018, cuando el procesado, J.C.G.M., volvía a la cárcel de Ocaña tras haber disfrutado de un permiso de salida del centro penitenciario, en el que está recluido para cumplir distintas penas de prisión.
En el registro de entrada, se le encontraron dos envoltorios que escondía en el interior de su cavidad anal, en los que había un total de 14,66 gramos de heroína con una pureza del 15,3 por ciento, que, mediante dosis y a cambio de precio, pretendía destinar a su distribución entre otros internos del centro penitenciario, mantiene el ministerio público.
Asimismo, precisa que con la sustancia intervenida podrían haberse elaborado al menos 89 dosis, que habrían alcanzado en venta un valor de 1.093,31 euros.
Para la Fiscalía, estos hechos son constitutivos de un delito contra la salud pública, en la modalidad de sustancias que causan grave daño a la salud en grado de tentativa, por lo que pide que el procesado sea condenado a la pena de cuatro años de prisión y a pagar una multa de 800 euros.