El balance que el Grupo Municipal Socialista ha hecho de la organización por parte del equipo de Gobierno Municipal de las navidades 2017/18 lo resume con términos como “triste”, “pobre”, improvisación”, “despropósito”, “desastre” y “caos”.
Luces apagadas y programas con retraso
“Las Navidades 2017-2018 pasarán a la historia como unas de las peores que se recuerdan en esta ciudad, marcadas desde su inicio por un alumbrado corto y pobre, muy contestado por los vecinos, y que para nada alegraba las calles más transitadas, por no hablar del pésimo mantenimiento, ya que han sido muchos los días en que las luces permanecían apagadas en uno u otro tramo sin que nadie solucionara el problema”.
Así ha comenzado su repaso a esta organización navideña el portavoz del PSOE en la ciudad, José Gutiérrez, quien ha enfatizado en “la falta de trabajo y de dedicación del Gobierno Ramos, empezando por el reparto de programas navideños, que comenzó cuando ya se habían celebrado varios actos”.
Mercadillos
La proliferación de mercadillos, abiertos en fechas distintas, “alguno antes de que empezaran las fiestas”, tampoco ha contribuido a crear un ambiente navideño, y sí a dispersar y a despistar tanto a los talaveranos como a los visitantes, dice.
San Silvestre
“Ni tan siquiera se ha respetado el espíritu de la San Silvestre, con la decisión de cobrar a los niños por participar, algo que nunca ha sucedido porque no se trata de una carrera para recaudar, sino para fomentar el deporte en familia y en un ambiente festivo”, lamenta Gutiérrez.
Cañas
Mención aparte -continúa con su repaso el portavoz socialista- merecen los problemas originados en la zona del Casco Antiguo durante las cañas de Nochebuena y Nochevieja, precisamente por la improvisación y una nula planificación. Para el portavoz del PSOE, “la cosa ya empezó mal, llevando a Pleno una modificación de la Ordenanza dos días antes de las fiestas, una auténtica chapuza que no solucionaba nada a nadie”.
Gutiérrez afirma que “el tema se les fue de las manos, como todo, porque con la gran afluencia de gente habría que haber previsto más vigilancia policial, control de los aforos y de los lavabos disponibles, algo que además se ha solucionado de la peor manera posible, colocando unos servicios portátiles en la misma fachada del Ayuntamiento”.
El portavoz ha afirmado que las cañas de Nochebuena y Nochevieja son una tradición, y que son miles los talaveranos que participan en toda la ciudad, “pero precisamente por eso, hay que tener previstos todos los posibles inconvenientes, vigilar el cumplimiento de las normas para que todo transcurra con normalidad, algo que no ha sucedido en esta ocasión”.
Suspensión de la Cabalgata
“La gota que ha colmado el vaso ha sido la supresión de la Cabalgata de Reyes, y el posterior desastre en Talavera Ferial, donde miles de personas aguantaron colas interminables bajo la lluvia, en medio de un caos de aparcamiento y con la gente indignada, algo que debe tener consecuencias políticas, porque no puede salir gratis haber acabado con las ilusiones de los más pequeños y luego tenerlos horas bajo la lluvia mientras Reyes y acompañantes estaban a cubierto”, ha afirmado Gutiérrez.
Balance
En definitiva, y para el portavoz socialista, en la organización del programa navideño, “como en tantas otras cosas, se deja sentir la falta de trabajo, de planificación y de dedicación a la ciudad que tienen Jaime Ramos y su equipo, a los que definitivamente se les ha ido la ciudad de las manos”.
