El celo de una vecina, la diligencia de la Guardia Civil y de los servicios sanitarios salvaron la vida de un hombre de 56 años residente en la localidad albaceteña de Bonete.
Y es que tras cuatro días sin verle ni escuchar ruidos en su domicilio una vecina decidió llamar al teléfono de emergencias 062 para comunicar su extrañeza ante la ausencia de noticias de su vecino.
Una dotación de la Benemérita desplazada a solicitud del COS (Central Operativa de Servicios) y tras recabar información de que este hombre padecía una enfermedad y que vivía solo, accedió a la casa por una ventana encontrándose a su morador tumbado en el sofá del salón en estado inconsciente.
Fueron los propios agentes los que iniciaron las tareas de reanimación y como refieren, “después de unos intensos minutos”, lograron que recobrase la conciencia.
Entretanto se personaron en la casa sanitarios del Centro de Salud de la localidad que le estabilizaron antes de su traslado al hospital de Almansa donde quedó ingresado.
Es de resaltar la profesionalidad, preparación e iniciativa demostrada por los componentes de la Guardia Civil cuya actuación evitó, a buen seguro, un hecho luctuoso.