María Dolores Mateo, la cofrade de la Hermandad de la Virgen de la Angustias que fue elegida –por mayoría de votos a favor- como Hermana Mayor y descabalgada del cargo por el arzobispo de Toledo basándose en un informe del vicario general, ha registrado –tanto en la Nunciatura Apostólica como en la oficina del Defensor del Pueblo- un documento para intentar conocer “la verdad del informe dado por el cura párroco de Santas Junta y Rufina al arzobispo, si es que existe, para no refrendarme como hermana mayor y qué clase de incapacidad tengo para no ocupar el cargo”.
María Dolores Mateo solicita amparo a estas instituciones porque la decisión adoptada por el arzobispo Braulio Rodríguez “no dejan en buen lugar mi honorabilidad, reputación, responsabilidad y capacidad. Quiero obtener la reparación de todos mis derechos que en justicia creo merecer”.
