Los miembros de la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo que visitaron Talavera el pasado 10 de febrero para conocer ‘in situ’ el triste discurrir del Tajo por la ciudad y para analizar las denuncias interpuestas por la plataforma talaverana en defensa de nuestros ríos sobre el incumplimiento de la normativa comunitaria en la gestión del Tajo, han dado a conocer sus conclusiones y consideraciones en un informe hecho público esta misma semana.
En este informe, los europarlamentarios instan al Gobierno español a la “revisión del caudal ecológico del río Tajo, que debería ser suficiente para alcanzar el objetivo de un buen estado en el río, permitiendo la suficiente dilución de las aguas residuales tratadas”, así como a la utilización de las desaladoras construidas en la costa mediterránea, para paliar la falta de recursos hídricos en la cuenca del Tajo.
Al respecto, recuerdan que estas infraestructuras fueron financiadas con fondos de la Unión Europea, que están “infrautilizadas” y que podrían “mejorar la seguridad de suministro de agua”. Una situación que, de seguirse en el Levante español estas recomendaciones europeas, incidiría directamente sobre la conveniencia, necesidad y prioridad del trasvase Tajo-Segura, contra el que se clama desde Talavera y desde toda Castilla-La Mancha.