Trágico desenlace para el hombre de nacionalidad ucraniana que el domingo decidió darse un baño en el embalse de Navalcán para refrescarse.
Efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil hallaba, en su segunda inmersión, el cuerpo sin vida del infortunado que se zambulló en una zona de pesca, la conocida como Dehesa de Calabazas, en la que no está autorizado el baño.
El hombre, de 52 años, había acudido con otros amigos como otros tantos domingos a pasar un día de pesca, pero su imprudencia le ha costado la vida.
El cuerpo ha sido trasladado al Instituto Anatómico Forense de Toledo donde se le practicará la autopsia para confirmar que la muerte se produjo por ahogamiento.