Una vez celebradas las procesiones de Semana Santa, las Mondas y el Desfile de Carrozas de San Isidro, celebraciones populares que motivaron el pasado 15 de marzo la retirada por parte del Ayuntamiento de más de 60 de los mojones instalados semanas antes en la remodelación llevada a cabo en la plaza del Reloj y la calle Corredera del Cristo, el Gobierno Municipal se plantea ahora continuar eliminando unos elementos rodeados por la polémica desde su aparición en estas vías.
Recordemos que tras las denuncias y quejas ciudadanas, por parte de conductores, de las cofradías y hermandades de Semana Santa y también de colectivos de discapacitados como la Once respecto a los problemas de accesibilidad generados por los mojones delimitadores de la calzada, el equipo de Gobierno decidió retirar un buen número de ellos, comprometiéndose a valorar posibles alternativas de cara a su sustitución por otros formatos e, incluso, la eliminación definitiva de los mismos.
Según apunta el alcalde, Jaime Ramos, en vista de la experiencia de los últimos meses “la idea es ir quitando todos los que podamos”. Para ello, los servicios municipales estudian una nueva fórmula para delimitar el área destinada al tráfico rodado y aparcamientos, al tiempo que será necesario “el respeto por parte del conductor” para no invadir las zonas de uso exclusivo peatonal.
“Por supuesto que la zona exenta queda mucho mejor, pero va a depender mucho del civismo de los conductores”, finaliza el alcalde.