Una gran cantidad de de personas -familiares, amigos y representantes de la clase política, empresarial, jurídica y social de Castilla-La Mancha- han despedido a la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, que falleció ayer a los 44 años, tras una leucemia que le diagnosticaron cinco días antes.
El funeral se ha celebrado en la Concatedral de Santa María de Guadalajara, donde ha llegado el féretro a las 11 horas de la mañana acompañado de la familia y de los miembros del Gobierno regional encabezados por el presidente Emiliano García-Page.
Desde los primeros bancos han seguido las exequias su esposo, Óscar, sus padres y sus dos hermanos, que han estado acompañados, entre otras autoridades, del propio García-Page y de la ministra de Defensa y expresidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.
Delante del ataúd -que acogía los restos de De la Cruz-, la imagen del Calvario, y un coro con varios intérpretes han dado el carácter de solemnidad y acogimiento a la misa con la que se ha despedido a la que fuera consejera del Gobierno regional, vecina del municipio de Cabanillas del Campo (Guadalajara).
La homilía ha sido oficiada por el vicario general, Agustín Bujeda, quien ha recordado que Elena de la Cruz, madre de una niña de 10 años, se casó en ese mismo templo en el año 2004 y ha lamentado su muerte “inesperada” que ha supuesto “un palo para todos”.
Murió con los zapatos puestos
“Ella murió con los zapatos puestos”, ha dicho Bujeda, ya que fue el pasado jueves en la tribuna de oradores de las Cortes de Castilla-La Mancha, durante su intervención en la sesión plenaria, donde comenzó a sentirse mal y desde donde fue trasladada hasta el Hospital Virgen de la Salud de Toledo, donde falleció ayer.
Así, el vicario ha resaltado la “vocación política” de la consejera, así como su amor por el arte, especialmente, por la pintura.”En el cielo estará dibujándonos a todos para siempre”, ha asegurado y también ha recordado “la sonrisa que tenía Elena para todos” y su “amabilidad”, así como su faceta de docente.
“Que nuestras lágrimas se conviertan en esa sonrisa que tenía siempre Elena”, ha pedido el vicario, acompañado por el presidente de ACCEM, Braulio Carlés, que le ha ayudado en los oficios.
También han estado presentes en la Concatedral el presidente de las Cortes regionales, Jesús Fernández Vaquero; el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, el expresidente regional José María Barreda; la diputada Isabel Rodríguez; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha; Vicente Rouco; el delegado del Gobierno en la región, José Julián Gregorio; así como el líder regional de Podemos, José García Molina y el secretario regional de UGT, Carlos Pedrosa
Todo el Consejo de Gobierno ha acudido a despedir a la que hasta ayer era su compañera en el Ejecutivo regional, del mismo modo que también han estado directores generales de la Junta, y parlamentarios regionales de los tres grupos políticos en las Cortes, PSOE, PP y Podemos.
Ademas del rector de la Universidad de Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Collado, el rector de la Universidad de Alcalá de Henares, Fernando Galván, y miembros de la Escuela de Arte de Guadalajara, de la que fue directora De la Cruz durante una década.
También varios presidentes de las diputaciones provinciales, como el de Toledo, Álvaro Gutiérrez, o el de Ciudad Real, José Manuel Caballero, y alcaldes, como la de Toledo, Milagros Tolón; la de Ciudad Real, Pilar Zamora, o el de Talavera de la Reina, Jaime Ramos, han arropado a los familiares de Elena de la Cruz.
Los bomberos de Guadalajara, de los que Elena de la Cruz fue responsable de su gestión durante su etapa de concejala en el Ayuntamiento de la capital, tampoco han faltado al sepelio.
El funeral ha transcurrido durante una hora y después el féretro, que ha salido entre aplausos de todos los presentes, quienes ha guardado un minuto de silencio, ha sido trasladado al tanatorio de la ciudad, para ser incinerado.
