El Gobierno de Castilla-La Mancha ha iniciado esta semana en el IES ‘Universidad Laboral’ de Toledo el plan de inspección del transporte público escolar del curso 2019-2020 en la provincia, donde hay 359 rutas que dan servicio a 11.357 escolares y 122 acompañantes.
El delegado de la Junta en Toledo, Javier Úbeda, y los delegados provinciales de Fomento y de Educación, Cultura y Deportes, Jorge Moreno y José Gutiérrez, respectivamente, han asistido a este primer control que se ha realizado a los vehículos para comprobar in situ este proceso.
Úbeda ha asegurado que el Gobierno que preside Emiliano García-Page se toma “muy en serio” este asunto y se preocupa de que el transporte escolar cumpla “a rajatabla” con las autorizaciones pertinentes y tenga la “máxima seguridad” a la hora de prestar el servicio.
Más exigencias
En este sentido, ha recordado que ya en la pasada legislatura, el Ejecutivo autonómico reforzó las exigencias en los pliegos de condiciones para la adjudicación de los contratos y para la prórroga de los que venían de la legislatura anterior a 2015, centradas en una menor antigüedad de los vehículos y en la necesidad de que todos lleven cinturón de seguridad.
El delegado de la Junta ha señalado que con estas inspecciones, que llevan a cabo los funcionarios del Servicio de Inspección de Transportes de la Delegación Provincial de Fomento, se pretende garantizar a las familias que el transporte escolar de Castilla-La Mancha cumple con todas las normas y es “uno de los más controlados del país”.
En ellas, los técnicos exigen que los vehículos no tengan más de 10 años de antigüedad, además de que dispongan de los elementos de seguridad mínimos como los cinturones, persona adulta acompañante, martillo de rotura de lunas, botiquín, suelos antideslizantes y una plaza por escolar, entre otras.
Asimismo, se comprueba que se tenga la ITV y los seguros en vigor, así como que se disponga de la autorización expresa de transporte especial de escolares otorgada por la Delegación Provincial de Fomento y los permisos de conducir, con el correspondiente título de capacitación CAP visado por Fomento, del conductor del autobús.
En el IES ‘Universidad Laboral’, donde se ha iniciado este curso el plan de inspección, confluyen siete rutas escolares procedentes de varios puntos de la provincia, que transportan a 370 estudiantes.
En el pasado curso 2018-2019 se llevaron a cabo un total de 28 inspecciones en la provincia para hacer un control exhaustivo de todas las rutas escolares.
Para este curso, el Gobierno de Castilla-La Mancha destina en la provincia de Toledo más de 8,5 millones de euros al transporte escolar, que cuenta con 359 rutas que dan servicio a 11.357 escolares y 122 acompañantes.