La Catedral y los monumentos de la Iglesia en Toledo abrirán sus puertas este sábado y lo harán de forma gratuita hasta el próximo martes para recuperar la normalidad y ayudar también a la sociedad toledana a remontar la situación vivida en estos meses de pandemia en una ciudad altamente dependiente del turismo, que ha dejado de recibir, como mínimo, 200.000 visitantes.
Así lo ha dado a conocer este jueves en rueda de prensa el deán de la Catedral, Juan Miguel Ferrer, quien acompañado del ecónomo diocesano, Anastasio Gómez, y de varios párrocos de la Diócesis, ha explicado detalladamente cómo se llevará a cabo la reapertura del templo primado, un monumento, que en momentos anteriores a la pandemia, han llegado a visitar 10.000 turistas al día y que, en estos tres meses, ha perdido alrededor de 200.000 visitantes, lo que se ha traducido en una pérdida económica de unos dos millones de euros para la Diócesis.
El deán ha resaltado el “gran esfuerzo económico” que para el Arzobispado de Toledo supone “recuperar la normalidad”, teniendo en cuenta las adaptaciones en las instalaciones que ha sido necesario realizar para cumplir con las recomendaciones sanitarias y de distanciamiento social, así como la formación que se ha tenido que dar a los trabajadores “para actuar acorde a las nuevas circunstancias y que sea una reapertura segura”.
Dicho esto, ha significado que la Iglesia afronta este esfuerzo “con alegría e ilusión”, consciente de que, de esta forma, ayuda también “a toda la sociedad toledana”, que se ha visto altamente impactada económicamente por la falta de turistas.
El deán ha reconocido que “el desastre vivido” desde el punto de vista económico para la Iglesia en estos meses de estado de alarma por el coronavirus “ha sido comparable a la época de guerras”, lo que ha hecho que “nos apretemos todos los machos -ha dicho- porque el golpe ha sido muy duro y lo hemos ido capeando, como todos los demás, con los Ertes establecidos desde el Gobierno”.
En este punto ha señalado que, según las estimaciones de las grandes agencias, se espera que, a partir de septiembre haya “una cierta reactivación” del turismo y que, a partir de marzo de 2021, el turismo internacional pueda cobrar ya cierta fuerza, “siempre con los interrogantes de la evolución de la pandemia y de la vacuna”, ha puntualizado Ferrer.
En el mismo contexto ha confiado en que “el turismo nacional nos dé una cierta ayuda en estos primeros meses y que el internacional empiece a responder con cierto nivel a partir del año que viene, a partir de la Semana Santa y hasta el verano, que es todo el periodo que hemos perdido este año, coincidente con la época de más visitantes”, ha significado.
De quinientos a mil visitantes
Con todo, el deán ha estimado en poder alcanzar una cifra de entre 500 y 1.000 visitantes diarios a partir de la reapertura, “una cifra que, aunque es bajita, con respecto a lo habitual, será una señal de que se empieza a perder el miedo o la gente se acostumbra a las medidas de higiene y protección”, ha señalado.
Sobre las novedades en la apertura de los monumentos religiosos, Ferrer ha detallado que la Catedral y los monumentos incluidos en la Pulsera Turística, como la Parroquia de Santo Tomé y la Sinagoga de Santa María la Blanca, serán gratuitos hasta el próximo 30 de junio.
La Catedral abrirá el sábado 27 de 10 a 14:00 horas, tanto para los fieles como para la visita turística, y el domingo desde las dos hasta las seis de la tarde, mientras que el lunes y el martes el horario será, como el sábado, de diez de la mañana a dos de la tarde, de forma totalmente gratuita, mientras que el 1 de julio empezarán a regir los precios vigentes.
Sobre las novedades con respecto a antes del cierre, el deán ha puntualizado que habrá algunos cambios por la situación excepcional y para evitar aglomeraciones de gente, tales como que la Custodia, uno de los tesoros más emblemáticos de la Catedral, va a estar “hasta que se normalice totalmente la situación” en la Capilla de San Ildefonso.
También se regulará el flujo de entradas y salidas a la Sala Capitular, dado que existe un único acceso de entrada y salida y, por tanto, los grupos no podrán superar el 70 por ciento del aforo mientras para las visitas a la Sacristía y la pinacoteca del tempo primado se ha establecido un itinerario, de forma que se entrará por la Sacristía y se saldrá por la Puerta de Reyes.
El deán ha explicado también que la visita turística se realizará por la Puerta Llana y se saldrá por la Puerta de Leones, que hasta ahora se mantenía cerrada, y otra novedad será el cierre de los monumentos dos horas durante la comida.
