El Gobierno regional está participando y financiando el proyecto de reintroducción del cernícalo primilla en el municipio de Ajofrín en colaboración con la Corporación local ajofrinera y entidades como CBD-Hábitat, SEO Birdlife, Grefa, Brinzal y empresas como la Fundación UMA.
Así lo ha explicado el delegado provincial de Desarrollo Sostenible, Tomás Villarrubia, durante la entrega y colocación en la torre de la iglesia de Ajofrín de 15 polluelos de cernícalo primilla criados en cautividad en Centro de Experimentación de Rapaces Ibéricas (CERI) de Sevilleja de la Jara.
Un acto en el que también han participado la alcaldesa de Ajofrín, María Isabel Alguacil, y varios representantes de la delegación episcopal de Toledo y el párroco del municipio.
El cernícalo primilla es un ave migratoria que a principios de otoño vuela hacia zonas más cálidas, concretamente a África, donde cruza el Sáhara hasta llegar a países como Senegal o Gambia donde proliferan los insectos, fundamentales en la dieta de esta ave.
El principal objetivo del proyecto de reintroducción es que estas aves vuelvan en primavera a la torre de la iglesia de Ajofrín.
Este proyecto se realiza mediante la técnica de ‘crianza campestre o hacking”, que consiste en la introducción de pollos a mitad de crecimiento en nidales adecuados en los que se aporta alimento durante unas 3-4 semanas hasta que sean capaces de volar y alimentarse por sí mismos.Una vez vuelan, se espera que algunos puedan retornar en el futuro a la zona donde se “liberaron” y formar en la misma una nueva población reproductora.
En el campanario
Así, estos quince pollos se han introducido en la caja de liberación del campanario con 20 días, y a los 35 días está previsto que comiencen a realizar sus primeros vuelos en el entorno de la iglesia.
Este es el segundo año que se está llevando a cabo este proyecto de reintroducción y liberación del cernícalo primilla en Ajofrín. Además, este año el Ayuntamiento ajofrinero ha repartido a las vecinas y vecinos del municipio que han querido participar en el proyecto `Ajofrineros por la Biodiversidad´ cajas nido para instalarlas en sus viviendas para recibir a los cernícalos primillas cuando regresen de África.
Asimismo, desde el Ayuntamiento ya se han realizado los primeros contactos para poner en marcha próximamente una campaña de sensibilización y educación ambiental dirigido al alumnado de 1º y 2º de ESO en el Instituto `La Sisla´ de Sonseca, en colaboración con la Corporación municipal vecina.
En Castilla-La Mancha se estima una población cercana a las tres mil parejas de cernícalo primilla.La mayor población se encuentra en Ciudad Real, donde se concentra el 36% de la población detectada y le sigue muy de cerca la población de Toledo que acumula otro 30% de los efectivos.
Las medidas de conservación principales para la especie como son la protección de los lugares de nidificación, evitando las afecciones a las colonias, la destrucción de nidos y molestias en el periodo de reproducción; y la conservación de los sistemas tradicionales de cultivos de cereal secano, son “condiciones por las que se trabaja desde la Consejería”, ha concluido el delegado provincial de Desarrollo Sostenible.