Este jueves ocupa la sección de los veteranos de la UD Santa Bárbara un hombre que ya no está con nosotros. Un mito que se convirtió en leyenda del club que era conocido como Paco Cacharra, aunque su nombre era Francisco García Martínez. Nuestro protagonista nació en la Ciudad Imperial en 29 de enero de 1924.
Sus primeros pasos como guardameta los dio en el año 1941 defendiendo los colores del equipo toledano de Educación y Descanso, antes de enfundarse otras elásticas como la del CD Toledo y CD Imperial.
Pero el verdadero mérito de Paco Cacharra ha sido el de crear una estela inolvidable como entrenador de fútbol. Comenzó su carrera de la mano de Ramón Mantojo, director de la Fábrica de Armas de Toledo y también entrenador. Paco ejerció como segundo de Mantojo en el equipo Carlos III, un club que –al fusionarse con el Alcázar de Toledo, en 1961- da origen a la UD Santa Bárbara.
Es en 1963 cuando Paco se hace con las riendas de la UD Santa Bárbara y permanece como entrenador hasta 1972. Con él en el banquillo se escriben las mejores páginas de la historia del club armero y se vive una época dorada gracias, entre otras cosas, por la labor desarrollada por una sobresaliente directiva.
Directivos de gran valía
Directivos como Exsuperio Revenga, Cruz Loaísa, Juan Muñoz, Julián Lorente o Tereso dieron cuerpo a esta excelente trayectoria.
Paco obtiene el título de entrenador nacional en 1967 y también ejerció como directivo de la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha hasta 1992.
Desgraciadamente falleció el 12 de julio de 1997, pero siempre llevó con orgullo ese espíritu de la UD Santa Bárbara. Tanto es así, que dos de sus hijos, Alfredo y Javi García Aceña, defendieron los colores del club del Carlos III.
