Eugenio Moraleda Gutiérrez es el invitado en la sección de los veteranos de la UD Santa Bárbara que este digital pone a disposición de sus lectores cada jueves. Nació en Toledo el 17 de enero de 1955 y a los trece años ya ejercía como futbolista en el equipo infantil del Toledo Imperial, club al que llegó en 1968.
Es al año siguiente, cuando Moraleda ficha por el equipo juvenil de la UD Santa Bárbara para exhibir sus cualidades desde la demarcación de defensa lateral izquierdo. Moraleda era zurdo, duro y expeditivo con los contrarios.
Es más, en aquella época en todos los campos se comentaba que la línea defensiva del juvenil armero –compuesta por Gálvez, Moraleda y Torán- era temida por todos los delanteros que participaban en esta competición liguera.
En 1970, el equipo juvenil del Santa Bárbara, en el que milita Moraleda, se proclama campeón de la provincia de Toledo y disputa el ascenso a la División de Honor, pero el cuadro de la Ciudad Imperial cae eliminado por el Chamartín, conjunto filial del Real Madrid.
En 1973, ya con 18 años de edad, Moraleda asciende al primer equipo armero de la mano de Paulino Lorenzo y realiza la pretemporada. Pero Moraleda decide poner fin a su carrera como futbolista y cuelga las botas de fútbol definitivamente.
No obstante, el duro defensa habla con cierto cariño de directivos de aquella época como Exuperio, Loaísa o Juanito; además del masajista Jesús y su hijo y ayudante Chule. No olvida a sus compañeros de equipo como Pepe Gálvez, Toni Torán, Titi, Del Pino, Juanin y José Jaime.
Actualmente, Eugenio Moraleda, está jubilado y vive en Toledo. Tiene dos hijos y cuatro nietos y para mantener la forma física camina diariamente.
