Esta semana se ha celebrado el acto de graduación de los 112 nuevos agentes que han participado en la primera edición de la XXXIII promoción del Curso Selectivo de Formación Inicial de Policía Local y los cinco subinspectores de la XV promoción del Curso Selectivo para esta categoría, que ocuparán sus plazas en 46 municipios de la región.
De los 112 nuevos policías, 27 son mujeres, lo que supone el 24 por ciento del total del alumnado, el porcentaje más elevado de las 33 ediciones que se han impartido de este curso de formación inicial.
Con la incorporación de esta promoción, la presencia femenina en el Cuerpo supone el diez por ciento de todos los agentes en ejercicio en esta región, superando la barrera de las 200.
En concreto, son 214 de una plantilla de 2.140 policías, de las que ocho son mandos.
“La incorporación de la mujer a la Policía Local de Castilla-La Mancha, por tanto, va siendo cada vez más constante, y aunque no son porcentajes muy altos, poco a poco se va ampliando la cifra”, ha señalado el viceconsejero de Administración Local y Coordinación Administrativa, José Miguel Camacho.
Camacho presidió la entrega de diplomas acreditativos junto al director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig; el delegado de la Junta en Toledo, Javier Úbeda; la delegada provincial de Hacienda y Administraciones Públicas en Toledo, María de los Ángeles García; y Francisco Javier Pasamontes, miembro de la comisión ejecutiva de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP).
Reducción de pruebas
El viceconsejero también ha reiterado el compromiso del Gobierno regional, anunciado por el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, de abordar, junto con los ayuntamientos y con los miembros de la Comisión Regional de Coordinación de la Policía Local, una reducción y agrupación del número de pruebas que se convocan en las oposiciones a las distintas categorías de los cuerpos de Policía Local de Castilla-La Mancha.
Camacho ha recordado que, en la actualidad son seis pruebas, algunas de ellas con dos partes, lo que ha considerado que supone “un esfuerzo desmesurado, tanto para muchas entidades locales a la hora de organizarlas, como para las personas aspirantes”.
Por ello, el objetivo fundamental de esta medida es agrupar la realización de varias pruebas en una sola o reducir su número para el acceso a alguna o a todas las categorías, “garantizando siempre que se cumplan los principios constitucionales de mérito y capacidad”, ha concluido Camacho.