La Federación del Profesorado de Tecnología de Castilla-La Mancha ha denunciado este martes que la Consejería de Educación, Cultura y Deportes quiere reducir las horas y el espacio de esta enseñanza el próximo curso.
En un comunicado, la Federación ha explicado que la aplicación de la ordenación académica de la nueva Ley Orgánica de Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE) supone “una grave pérdida de peso específico y espacio curricular” en las materias relacionadas con la Educación Tecnológica y la Digitalización de cara al próximo curso.
Asimismo, ha indicado que con la nueva normativa los docentes de estas materias tenían la “esperanza” en Castilla-La Mancha de “un mejor trato” a este colectivo que “ley tras ley se ve obligado a cambios curriculares importantes que conllevan continuas acciones de autoformación individual y colectiva”.
En este sentido, han señalado que han tenido que aprender de la experiencia que ha supuesto el confinamiento por la pandemia de la covid-19 y han defendido que, gracias a las tecnologías digitales, la vida educativa ha seguido “con más o menos éxito” en función de la competencia digital del alumnado.
Sin embargo, han lamentado que la no concesión de un número de horas suficiente y en línea con los mínimos que marca el Ministerio y la exclusión de algunas de las materias de cursos como 3º de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), “trampolín” para las troncales y optativas de 4º, Bachillerato y Formación Profesional, marcan las directrices de lo que han considerado “un paso atrás para el alumnado y la educación tecnológica” en la región.
Además, han apuntado que si se tienen en cuenta a otras comunidades autónomas donde sí se valoran y conceden el peso que corresponde a estas materias, “la incomprensión es aún mayor”.
Por todo ello, la Federación ha manifestado que resulta “inconcebible” que insistan desde organismos internacionales, nacionales y regionales, incluida la propia Consejería de Educación, en la importancia de fomentar las vocaciones tecnológicas entre los jóvenes como garantía de futuro de las regiones y, sin embargo, en la propuesta de ordenación académica de la enseñanza la Tecnología “queda reducida a la mínima expresión”.
El colectivo ha expresado su “extrañeza” por la organización horaria de la ESO y Bachillerato de Castilla-La Mancha y el “malestar” que ha generado la propuesta “restrictiva” de cursos y niveles, al tiempo que ha ofrecido su “buena disposición” para tratar la problemática de las materias tecnológicas y de su profesorado, acercar posturas y llegar a acuerdos de mejora.
