La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha afirmado que las empresas todavía no están repercutiendo la subida energética en el producto final, algo que “empezará a cambiar en un par de semanas porque no se puede contener el incremento de los precios sin repercutirlo en el precio final del producto”.
A preguntas de los periodistas durante un acto de la Guía Michelín, en el que se ha anunciado que la ciudad de Toledo acogerá la gala de este año, la consejera se ha referido a consecuencias de la huelga de transportes en la industria y en las empresas.
Franco ha dicho que “están siendo años muy complejos en la gestión” porque sin haber salido de la crisis de la covid-19 ha llegado la guerra de Ucrania, el encarecimiento de los precios energéticos y la afectación a la cadena de valor industrial, y la huelga de transportistas y su incidencia en la cadena de valor.
Ha citado algunos sectores afectados, como el ganadero y el agroalimentario, el del transporte o el industrial, ha señalado el encarecimiento del precio combustible y que la factura de luz se ha multiplicado por tres o incluso por cuatro y ha argumentado que “de momento las empresas no están repercutiendo el coste al producto final, pero esto va a tener que empezar a cambiar en un par de semanas porque no se puede contener el incremento de los precios sin repercutirlo en el precio final del producto”.
Franco ha dicho que el Gobierno regional está trabajando de forma coordinada con el Gobierno central y realizando aportaciones a los ministerios “para que tomen decisiones que mejoren la situación económica” y ha esperado que “en breve” el Gobierno de España articule medidas para ayudar a los sectores más afectados, bonificar a las familias por la subida energética y, sobre todo, finalizar la huelga de transportes “para evitar que la falta de suministros se prolongue más allá de estos días que llevamos”.
“Capacidad de resistencia”
Ha confiado en la “capacidad de resistencia de nuestro tejido empresarial y nuestros trabajadores” aunque el contexto internacional es “muy complejo”, y explicado que la caída del 0,5 % del PIB que barajan los economistas por la guerra a Ucrania ralentizará “el crecimiento que ansiábamos después de la crisis del covid”.
La consejera también ha dicho que no están cuantificadas las pérdidas debido a la huelga del transporte porque la situación es “desigual” en lugares y productos, y ha afirmado que el mensaje que la Unión Europea debe sacar de esta situación es una estrategia de industrialización para no depender de mercados terceros y garantizar “nuestros suministros”.
A su juicio, Europa debe plantearse apostar por la industria europea y garantizar la cadena de valor y la no dependencia de terceros países ni en el ámbito energético ni en los suministros: “Espero que Europa, esta vez, se lo tome en serio porque no estamos para tensionar mucho más la economía de las familias, pymes y autónomos”, ha apuntado Patricia Franco.
Sobre cómo puede repercutir esta situación en el desempleo, ha dicho que, en cifras redondas, Castilla-La Mancha tiene 150.000 desempleados en un “contexto muy complejo” pero durante la crisis financiera hubo más de 270.000 parados.