El anunciado simulacro de incendio en el túnel de Los Yébenes, en la carretera N-401, ha representado un éxito operativo y servido para probar el nuevo sistema automatizado de extracción de humos y el software de control integral de toda la instalación, las cámaras de visión y la audición tanto dentro del túnel como con el centro de control.
La ley prevé que se realicen en este tipo de construcciones simulacros cada cuatro años, que pueden adelantarse por la incorporación de novedades en el sistema, como ha ocurrido este año ya que en 2016 se realizó uno donde el suceso era un accidente de tráfico.
El subdelegado del Gobierno en Toledo, Carlos Ángel Devia, ha asistido al simulacro y destacado “la coordinación de todos los implicados en el proceso, tanto del Estado como de la Junta de Comunidades y la Diputación de Toledo, y que se ha desarrollado según lo previsto”.
La actuación conjunta de los servicios de emergencia propició que la carretera quedase cortada entre 8 de la mañana a 3 de la tarde, funcionando igualmente los desvíos previstos ante una contingencia de este tipo.