El Colegio de Médicos de Toledo ha mostrado “toda la solidaridad del colectivo médico de la provincia” con las compañeras, una médica y una enfermera, amenazadas de muerte el pasado martes en el Centro de Salud de Novés y ha vuelto a mostrar su repulsa ante unos hechos “inadmisibles, que constituyen una auténtica lacra y un delito de atentado contra la autoridad”.
La institución colegial toledana condena enérgicamente el suceso y ha querido subrayar la necesidad de denunciar siempre estas agresiones, llevadas a cabo por los propios pacientes o familiares de éstos que ponen en riesgo la relación médico-paciente y la seguridad que debe presidir la asistencia sanitaria.
Así lo han señalado la presidenta y el secretario general del Colegio de Médicos de Toledo, Natividad Laín y Raúl Calvo, respectivamente, quienes han insistido en lo “inaceptable” de situaciones como la registrada en Novés por parte de un paciente que había sido atendido en el centro sanitario y que se molestó por no lograr un certificado para eludir el uso de la mascarilla, porque no cumplía los parámetros sanitarios para tal fin.
Recursos jurídicos
Asimismo, recuerdan a todos los colegiados su compromiso de poner a su disposición los recursos jurídicos de la institución para tramitar las correspondientes denuncias y ha instado nuevamente a los facultativos a “protegerse y tomar las máximas medidas de precaución para preservar su propia seguridad y evitar en lo posible cualquier tipo de agresión”.
En este sentido, desde el COM Toledo ha reiterado a todas las autoridades políticas, sanitarias y fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado la necesidad de que “sigan trabajando para garantizar que los sanitarios ejerzan su labor en las condiciones de máxima seguridad y en trasladar a la sociedad la idea de la tolerancia cero a las agresiones a sanitarios”.