“Nos han metido un gol por toda la escuadra, pero el partido todavía no ha terminado”. Así se expresa Pedro Prado, vecino del número 60 de avenida del Príncipe, edificio que linda con la antigua piscina de La Solana, una vez conocido que el convenio urbanístico aprobado en el Pleno de septiembre entre el Ayuntamiento y la promotora El Chaparro 2012 contempla la creación en dicho solar de una zona verde de unos 900 metros y el aprovechamiento comercial de los 3.000 restantes.
Prado, que ha ejercido como portavoz de los residentes en el entorno de la antigua piscina en distintas ocasiones, incluida la sesión plenaria del mes de junio, refiere que desde hace varios años éstos reclaman la conversión de la zona en una gran plaza pública y se oponen frontalmente a la posibilidad de que se autoricen nuevas construcciones “y mucho menos el uso comercial”.
Y es que los vecinos tienen el convencimiento de que “detrás de todo está la intención de poner una gasolinera debajo de nuestras casas”. Al respecto, cabe recordar que, tras el revuelo levantados, en junio de 2014 el Gobierno Municipal ya denegó la licencia solicitada entonces para instalar en el solar un negocio de carburantes.
Ahora, Pedro Prado asegura que, a pesar de su reciente intervención en el Pleno, “nadie nos ha informado de nada, anunciando que los vecinos volverán a movilizarse para “luchar contra lo que nos quieren hacer”.
Ganemos se pone a disposición del vecindario
En la mañana de este viernes los vecinos han recibido el apoyo expreso de Ganemos Talavera, el único grupo municipal que votó contra el nuevo convenio urbanístico. Su portavoz, Sonsoles Arnao, ha vuelto a lamentar que “el Ayuntamiento vuelva a defender los intereses particulares en detrimento del bien general”, advirtiendo también que “se puede estar allanando el camino para la gasolinera”.