El descenso de población y de nacimientos provocará en los próximos años una anomalía previsible en Talavera de la que hasta el momento no se conocen medidas efectivas para corregirla.
Con datos de 2016, Talavera ha perdido casi 5.000 personas de población censada en los últimos seis años. Por otro lado, el número de nacimientos ha caído empicado: de los más de 1.100 del año 2008, la cúspide estadística de las dos últimas décadas, a unos 700 en 2016. Cuatrocientos niños menos que serán matriculados en los colegios de la ciudad y que alientan al debate de eliminación de unidades, bajadas de ratios, prescindir de profesores incluso, en un futuro más lejano, cerrar colegios por falta de alumnado.
El presidente de la Junta de Personal de los centros públicos en la provincia de Toledo, José Manuel Oviedo, declara a este digital su “preocupación” por ese futuro de la enseñanza en Talavera y su comarca, en especial de la pública. “Lo que pasa en Talavera no pasa en ningún sitio de Castilla-La Mancha porque Talavera tiene una especificidad que no tiene ninguna ciudad ni zona de la región”.
Oviedo alude directamente a la preponderancia que tiene en el sistema educativo talaverano la enseñanza concertada, que supone un 60 por ciento de la oferta, mientras la media de Castilla-La Mancha es del 81 por ciento de oferta en enseñanza pública y de un 19 en la concertada. La “culpa” la achaca al “desinterés y desidia” por parte de las administraciones y a la “permisividad por dejar que proliferasen centros concertados y cooperativas”, aportando el dato que media entre la construcción del penúltimo colegio público de Talavera, el Pablo Iglesias en 1984 hasta el último, el Bartolomé Nicolau en 2010; “la apuesta por la educación pública brilló por su ausencia durante 26 años”.
Panorama
Así, el panorama que se avecina es cuanto menos complejo ya que mientras en la actualidad se matriculan en Talavera de media más de 1.000 niños en los diferentes cursos de Primaria, en tres o cuatro años serán poco más de 700 en el mejor de los casos. En la actualidad la pérdida de matriculación ya está en torno a los 200 alumnos/año. La bajada de ratios discriminatoria para con Talavera en tres cursos paliará en parte esta desproporción pero no será suficiente “ni la solución definitiva al problema”.
Cuando las ratios alcancen cotas desconocidas, si no antes, se presume la pérdida de unidades escolares y la reducción del número de docentes y temen que las flechas apunten nuevamente a la enseñanza pública. El presidente de la Junta de Personal recuerda que el sueldo de los profesores de la enseñanza concertada se paga con dinero público, además de las ayudas que reciben los centros para gastos de funcionamiento. “Es necesario un gran pacto educativo”.
Pacto educativo
Para Oviedo la solución pasa por “un gran pacto educativo” en el que todos los estamentos y agentes implicados analicen en profundidad la situación actual y se alcancen “acuerdos y consenso mediante el dialogo, porque esto afecta y afectará a cualquier tipo de enseñanza”.
Lógicamente, adelanta, habrá que partir de esa caída de la natalidad, ya que el factor poblacional y la dispersión deben tenerse en cuenta tanto por el gobierno regional, que tiene las competencias, como por el Estado, “no valdrán parches”, avisa.
En cuanto a la dispersión -apunta Oviedo- tiene otra vez mayor incidencia en la comarca de Talavera. Los once CRAs (Centros Agrupados Rurales) se encuentran, algunos, “al borde de la asfixia por falta de alumnado y porque la despoblación en los pueblos va en aumento por falta de oportunidades. Ya es penoso ver que un niño de 4 ó 5 años tener que madrugar más de la cuenta para ir a clase a otra localidad y si no ponemos coto todo va a ir a peor”.
Como representante de los colegios públicos, Oviedo defiende la enseñanza que imparten que “ofrece un grado de formación y un compromiso de sus profesores tremendo, por lo que será necesario alcanzar acuerdos para revertir esa gran desproporción que hay en Talavera. Pero insisto, este probelmón nos afecta a todos”.
Recortes
Los “salvajes” recortes del gobierno Cospedal entre 2011 y 2015 “damnificaron” a la enseñanza pública. 5.312 profesores, 200 de ellos en Talavera, perdieron su puesto de trabajo y apenas 400 lo han recuperado en toda la región desde la llegada de García-Page y “con contratos de media o tres cuartos de jornada muchos de ellos. Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma con más profesores interinos de España, que son los primeros que se fueron a la calle, algo que no pasó en la concertada pues los profesores perdiendo algo de su sueldo mantuvieron sus puestos de trabajo aunque tuvieran que ser recolocados algunos de ellos. Es una perversión consentida con la concertada, una enseñanza que debería ser sólo un refuerzo para donde no llega la pública”, lamenta Oviedo.
En este sentido, Oviedo quiere desmentir al representante del sindicato FSIE, Mariano Ramos, que en una carta al director de este digital aseguró que los profesores de la enseñanza pública rechazaron mantener sus puestos de trabajo a cambio de una bajada en sus emolumentos. “Eso es mentira -enfatiza Oviedo-, nunca se ha ofrecido a los docentes de la enseñanza pública este tipo de acuerdo. La verdad es que proliferaron los despidos y aún así se aplicó una bajada de sueldos y perdimos la paga extra de 2012. Ahora nos van a aplicar una subida del 1,5 por ciento desde enero de 2017, sin más carácter retroactivo pero aún así cobraremos menos de lo que cobrábamos en 2010. Además, durante el cuatrienio del PP ni se eliminó una sola unidad ni hubo despidos en la enseñanza concertada mientras en la pública se cebaron”.
Por último, José Manuel Oviedo lamenta que “siempre pagamos los mismos, creo que es hora de sentarse ya a hablar y buscar soluciones más pronto que tarde”.