La Sala Capitular del consistorio toledano ha acogido este viernes a los niños y niñas saharauis y a sus familias de acogida que participan este verano en el programa de cooperación denominado Vacaciones en Paz.
El Gobierno local – por boca del concejal de Servicios Sociales, Javier Mateo; la viceportavoz del Gobierno local y edil de Igualdad, Inés Sandoval y la edil de Participación Ciudadana, Helena Galán– ha reiterado el compromiso social y político que mantiene desde hace años con la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Toledo a través de un convenio y de la ayuda destinada a través de la Concejalía de Cooperación y ha agradecido el “apoyo y la solidaridad” de las familias acogedoras que son “el pilar de este programa”.
Emoción
El acto de bienvenida ha contado con la presencia del Delegado del Pueblo Saharaui en Castilla-La Mancha, Bulahi Mohamed Fadli y la presidenta de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Toledo, Ana Garrido, quienes han celebrado que “un año más, haya familias dispuestas a abrir sus casas para que estos niños pasen dos meses de verano en una situación cómoda y lejos del tremendo calor que pasan en los campamentos saharauis”, con temperaturas cercanas a los 50 grados en estos días.
Garrido ha deseado que este sea “un año más y también un año menos” de esta situación política que soportan estos menores y sus familias, fruto de “una injusta e ilegal ocupación”. También, ha dicho sentirse “emocionada de volver a ver la sala Capitular llena de banderas saharauis” y ha mantenido que entre los objetivos de su asociación se encuentra también la difusión de la causa política para darle “más visibilidad” y que también “se conozcan las constantes vulneraciones de los derechos” que sufren los saharauis.
