El cementerio de neumáticos más grande de Europa, que se encuentra situado entre Seseña y Valdemoro –en la Comunidad de Madrid- ha sido escenario de un incendió que ha tomado cuerpo a las dos de esta madrugada. Las llamas han consumido una hectárea de la zona y han provocado una gran nube de humo, según han informado fuentes de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid.
No obstante, no existe amenaza alguna para las casas que están ubicadas en esta zona y, mucho menos, para el casco urbano. Para apagar las lenguas de fuego han participado una decena de dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid y del Consorcio de Bomberos de Toledo.
Según informa la Policía Local de Seseña, se han suspendido las clases en el colegio El Quiñón y se ha recomendado a los vecinos de la zona que no salgan de sus casas, que cierren las ventanas y que no pongan el aire acondicionado. Y es que el incendio ha provocado una humareda muy intensa que hasta se puede contemplar desde la A-4, por lo que ha llevado al Gobierno regional a activar el nivel 1 del Platecam.
El origen de este incendio, que se ha instalado en un cementerio que alberga noventa toneladas de neumáticos, se desconoce hasta el momento; aunque se sabe que se ha iniciado en la zona que está situada en el término municipal de Valdemoro. El presidente regional, Emiliano García-Page, se ha desplazado hasta este escenario.
Un problema sin resolver
El cementerio de neumáticos de Seseña, el mayor de Europa, alberga cerca de 100.000 toneladas de neumáticos usados. El setenta y cinco por ciento de su superficie pertenecen a la Comunidad de Castilla-La Mancha y el resto a Madrid. Un problema de contaminación medioambiental que ambas administraciones esperaban resolver y que tras múltiple reuniones y un principio de acuerdo “se diluyó como un azucarillo” el pasado mes de febrero. Incluso había tasación sobre los trabajos de retirada de las cubiertas, unos tres millones de euros.