El portavoz del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo, José Pablo Sabrido, ha lamentado el trágico accidente ocurrido el lunes, con la muerte de una niña de 12 años al ser golpeada por una rama desprendida de un árbol junto al colegio ´Santiago el Mayor´, pero ha rechazado que hubiera “negligencia”.
Sabrido ha explicado que la Unidad Gestora municipal, responsable de los planes de poda, actúa de forma establecida y regular, en este caso con el segundo plan 20126-2017, iniciado en noviembre y que acaba a principios de abril, pero que luego actúa con inspecciones constantes y que “se comprueban todas y cada una de las denuncias y se adoptan las medidas que estiman más oportunas”.
El edil ha confirmado que el pasado 2 de febrero se recibió una denuncia del colegio de la Plaza del Solar de Antequeruela que avisaba de que había un árbol que “parecía inclinado y podía suponer un riesgo”, que comprobaron los técnicos y que “informaron que no existía riesgo inminente” tras una completa revisión de todos los árboles.
No era ese árbol
“Además, el árbol que ha caído no era del que se avisaba en la denuncia”, ha ampliado Sabrido, quien ha añadido que dos días después los técnicos volvieron a revisar la plaza y “la zona”, y “hasta el propio jefe del parque de bomberos señaló que no se apreciaba, a primera vista, riesgo en ninguno” por lo que “con la actuación prevista de poda era suficiente”.
Tras insistir en que “no hay negligencia, ha sido un accidente”, ha mandado un mensaje de calma a los toledanos porque “los técnicos están en permanente actuación para que no se registren riesgos”, y ha recordado actuaciones anteriores en la plaza Amador de los Ríos o en la plaza de San Vicente, como caídas también de árboles y ramas en Ciudad Real y otros lugares de la región el pasado lunes, día en el que “aquí en Toledo había nivel 2 de alerta por viento”.
“Claro que puede existir un accidente, pero no se puede confundir con el trabajo de los técnicos y su plan de poda y de previsión de riesgos”, ha sostenido Sabrido.
El plan de poda 2016-2017 mantiene los plazos, pero ha reconocido que, a raíz de la muerte de la niña, “reforzaremos la inspección, estaremos más pendientes aún y fomentaremos la participación de los vecinos”.
Sobre la posible causa de la caída de la rama, dentro de “las múltiples”, ha indicado que “por la apariencia externa no ofrecía riesgo y una vez inspeccionada parece que una parte estaba podrida, que no se podía apreciar desde el exterior”.
También ha remarcado que las denuncias recibidas estos días “piden revisar” el estado de los árboles y “los técnicos van a hacerlo, sobre todo con los más antiguos y donde hay una mayor concentración de personas”, ha concluido.