Al igual que manifestase hace pocas fechas la consejera de Fomento –Agustina García Élez-, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha mostrado su “preocupación” por las infraestructuras en comunicaciones en Talavera de las que “se lleva hablando una década”.
“Gravedad y preocupación”, ha dicho, y más tras la reciente visita del ministro de Fomento –Iñigo de la Serna- en la que quedó patente que Talavera aún “está fuera del mapa del Ministerio de Fomento”.
Por ello, y en esa reunión que tiene pendiente desde hace meses y que se ha demorado en parte por el problema catalán, Page quiere “poner las cartas sobre la mesa sobre la situación de Talavera, especialmente de sus infraestructuras”, por lo que exigirá la “disposición económica” necesaria para tener cuanto antes el AVE.
También solicitará un “compromiso fehaciente” para que la Plataforma Logística para mercancías se implante en la Ciudad de la Cerámica.
En este sentido, Page recordó que ese compromiso ya existe en otras ciudades y “ya no es hora de contarlo, sino de programarlo. Es el momento de corregir el tiro”, ha enfatizado.
Corredor atlántico
El presidente autonómico ha mostrado igualmente su preocupación por el impulso que el Estado va a dar en los próximos quince años al corredor mediterráneo “que me parece muy bien”, sin embargo -entiende-,“no puede ser a costa de un descarte y abandono del eje de comunicación europeo, que tiene que ver con el centro y el Atlántico”.
Page ha anunciado que está en contacto con presidentes de otras regiones, especialmente de Castilla y León, con quién está muy avanzado el encuentro, para tratar esta posible discriminación negativa para los intereses de los castellanomanchegos y los castellanoleoneses.