Asaja de Toledo va a pedir que se declare a la provincia como zona catastrófica, debido a los daños que han provocado en el sector agrícola y ganadero toledano la tormenta Filomena y el hielo que está generando la posterior ola de frío.
Con el fin de elaborar los informes pertinentes para formalizar esta solicitud, la organización agraria está solicitando a los ayuntamientos toledanos que colaboren en la recopilación de datos sobre “los estragos” que ha causado Filomena en la provincia.
Y también ha avanzado que va a pedir a los ayuntamientos que apoyen a los productores con bajada de impuestos y la supresión de tasas como las licencias para la reconstrucción de las naves agrícolas y ganaderas que se hayan caído.
Asaja ha recordado que la provincia de Toledo está siendo una de las más afectadas de España, tanto por la nevada caída entre el jueves y el sábado, como por las heladas, con temperaturas mínimas que en los últimos seis días están batiendo las cifras históricas en muchos municipios, dificultando el deshielo y la recuperación de las producciones.
Al respecto, ha indicado que el olivar es el cultivo más perjudicado, sobre todo en las comarcas de Montes-Yébenes, Montes-Navahermosa, Mora, la Jara y muchos municipios de la Mancha, ya que el peso de la nieve está tronchando las ramas de los olivos y el fruto se ha helado y se ha deshidratado, “lo que, por sí solo, ya supondrá una merma en la producción”.
Además, los olivareros temen que la aceituna se caiga antes de poder entrar en las parcelas para su recogida.
Pero lo que más les preocupa es el riesgo de que haya olivos que se terminen helando, porque implicaría que se tendrían que cortar por la cruz y esperar a que se regeneraran, pero no volverían a dar producción hasta pasados un mínimo de cuatro años.
En este sentido, Asaja de Toledo ha recordado que este supuesto no está cubierto por el seguro agrario en el caso de plantaciones ya asentadas, puesto que tan solo se contemplan indemnizaciones en plantones jóvenes.
El sector ganadero, muy perjudicado
Asimismo, ha indicado que el otro sector más perjudicado es el ganadero, de forma que las granjas extensivas tendrán que asumir mayores costes por la alimentación a base de piensos ante la falta de pastos, mientras que muchos ganaderos han tenido problemas de abastecimiento de pienso “y a día de hoy, sigue habiendo muchas dificultades para entrar en las explotaciones”.
A estas circunstancias se añade el hundimiento de establos y otras instalaciones, “destrozando, en algunos casos, maquinaria y aperos, y en los más graves, atrapando al ganado dentro”, ha indicado la organización agraria.
Por otra parte, ha explicado que el temporal ha afectado igualmente al resto de producciones, como a plantaciones de frutos secos, con caída de ramas por el peso de la nieve, y ha advertido de que la persistencia del hielo podría perjudicar al cereal, aunque hasta dentro de un mes no se comprobará si las siembras se recuperan y siguen su proceso vegetativo.
En cuanto al viñedo, aunque el cultivo está en descanso vegetativo, las cepas en vaso podrían helarse como consecuencia de la prolongación en el tiempo de las bajas temperaturas.
Aparte de los daños en los cultivos, los agricultores y ganaderos estás sufriendo importantes pérdidas por la caída de naves, que están afectando, además, a animales maquinaria, etcétera, ha reiterado Asaja de Toledo, que ha demandado a los ayuntamientos que exoneren a los afectados de los impuestos y gravámenes municipales que tendrían que pagar para levantar nuevas instalaciones.
A todas estas incidencias se suma el hecho de que se han visto dañadas las instalaciones eléctricas de fincas, con caída de postes de luz, ha apuntado Asaja, que aconseja que se vacíen los circuitos de las infraestructuras de regadío para prevenir averías por heladas.