El Plan Ceres, puesto en marcha por la Guardia Civil hace seis meses ante la proliferación de delitos en la comarca toledana de La Sagra, ha permitido reducir un 41 por ciento la delincuencia grave y organizada con respecto al año 2019.
Así lo ha dado a conocer este lunes la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, en una rueda de prensa en la Comandancia de Toledo en la que ha hecho balance de este plan y ha avanzado que se prorrogará ante el “éxito” del mismo y los “buenos resultados” obtenidos en esta primera fase.
Los datos
Gámez ha destacado el descenso del 53 % de los delitos de robo con fuerza en las cosas y ha subrayado que, en relación a los delitos muy graves, se han realizado ocho operaciones “de gran calibre” que se han saldado con 64 detenidos y seis personas investigadas, así como 159 delitos esclarecidos tanto de tipología grave como muy grave.
Asimismo, ha indicado que se han desarticulado cinco grupos criminales y se han recuperado efectos (como drogas, vehículos, armas, entre otros) por un valor superior a los 12 millones de euros, además de que en la actualidad hay en curso una decena de operaciones abiertas.
En general, Gámez ha recalcado que se ha logrado “la mayor bajada de delitos graves en los últimos cinco años”, y también de delitos menos graves y leves contra el patrimonio que eran otro de los objetivos de este plan y que han experimentado una reducción del 34 % respecto al mismo período de 2019.
En este punto, ha hecho hincapié en la caída de los índices de este tipo de delincuencia tanto en el puesto principal de Illescas como en el de Valmojado, así como en el 36 % de esclarecimiento cosechado y las 664 detenciones realizadas.
Plan Ceres
La directora general de la Guardia Civil ha recordado que el objetivo del Plan Ceres era la puesta en marcha de un operativo de alto impacto cuyo objetivo fundamental era ofrecer una “respuesta adecuada” a un tipo de delincuencia que estaba proliferando de manera preocupante en la comarca de La Sagra, sobre todo delitos contra el patrimonio y otras infracciones que representaban ya el 37 % de la criminalidad de la provincia.
De esta manera, la finalidad era llevar a cabo una actuación que permitiera desmantelar organizaciones criminales e intervenir sus recursos y sus activos financieros con el fin de garantizar las condiciones de seguridad objetivas y subjetivas en la zona, no solo en La Sagra sino también en los puestos de Ocaña, Fuensalida y Torrijos y las áreas de interés operativo del sur de Madrid.
Para ello, se implementó una estructura operativa específica para proporcionar y reforzar el análisis y la investigación por un lado y la intervención y apoyo operativo por otro, para garantizar una mayor presencia de efectivos coordinados con lo servicios territoriales, y en concreto se reforzó la Unidad de Investigación del Equipo Ceres con 10 componentes además de contar con otros grupos y servicios.
Continuidad del plan ‘sine die’
Gámez ha concluido que, tras un semestre en marcha, esta operación e inversión en medios personales y materiales “ha merecido rotundamente la pena” porque los resultados han sido “elocuentes” y se han ejecutado dispositivos preventivos de seguridad ciudadana y operaciones de investigación “de alto impacto”.
Por este motivo, la prórroga del plan, que seguirá vigente ‘sine die’ con las respectivas evaluaciones, responde al objetivo de “mantener el mismo nivel de apoyo y consolidar estos resultados para definitivamente poder dar al traste con los intereses de algunos grupos organizados o particulares de incrementar la criminalidad en esta zona”, ha sentenciado Gámez.