El pleno de la Diputación de Toledo ha aprobado este martes una modificación de crédito del presupuesto, que va a permitir destinar al Plan Extraordinario de Inversiones (PEI) 18 millones de euros, procedentes de remanentes.
A través de este acuerdo, que ha sido aprobado por unanimidad por todos los grupos representados en la Corporación, la Diputación de Toledo va para destinar 18 millones de euros al Plan Extraordinario de Inversiones en los municipios toledanos, que ha sido recurrente en los últimos años, según ha indicado el portavoz del equipo de gobierno, Santiago García Aranda.
Asimismo, ha puntualizado que el PEI “este año tiene una cifra histórica, que se incrementa en un 20 por ciento sobre la del ejercicio de 2021, de 15 millones de euros”, ha informado la Diputación de Toledo.
García Aranda ha destacado que el PEI busca que los ayuntamiento puedan acometer obras que permitan revitalizar la economía municipal en los distintos pueblos y localidades de la provincia “y neutralizar la ralentización económica que se nos presenta con la coyuntura nacional e internacional que puede poner en peligro la tan ansiada recuperación económica y social después de la crisis derivada de la pandemia del coronavirus”.
Sin deuda
Además de este acuerdo, el pleno corporativo ha aprobado, también por unanimidad cancelar la deuda restante de la Diputación de Toledo, “de tal manera que no tendrá ninguna deuda con entidades financieras”, ha apuntado García Aranda.
En este sentido, ha valorado que el Gobierno de la Diputación Provincial, que a 30 de junio de 2015 se encontró una deuda de 52,2 millones de euros, “ha sido capaz de ir reduciéndola año a año gracias a la eficiente y eficaz gestión presupuestaria, hasta llegar al momento actual de deuda cero.
Según el portavoz y vicepresidente de Cooperación, Infraestructuras, Hacienda y Presupuesto, esta medida económica “certifica la suficiente capacidad de ahorro que genera la ejecución del propio presupuesto de la Diputación de Toledo, que con recursos propios es capaz de atender la totalidad de los gastos contenidos en el presupuesto, sin necesidad de recurrir al endeudamiento o financiación ajena”
Y ha subrayado que “se manifiesta así una solvencia financiera robusta, consecuencia de una gestión económica acertada y solvente del equipo de gobierno”, y ha añadido que esta circunstancia “permitirá presupuestar los recursos económicos suficientes para la financiación de los programas de gasto en los importes contenidos en el proyecto de presupuesto”.
