Los Presupuestos Generales de Castilla-La Mancha contemplan una inversión de 15,2 millones de euros para obras hidráulicas, fundamentalmente para depuración, por lo que –a la espera de que el Estado se decida a construir las depuradoras en el río Amarguillo, en Camuñas, Consuegra, Madridejos, Urda y Villafranca de los Caballeros- el Gobierno regional va a reanudar las obras de edificación de depuradoras para treinta localidades de la provincia de Toledo a través de diecisiete proyectos.
Precisamente estos municipios tienen abiertos procedimientos de sanción por incumplimiento de las normas de depuración establecidas por la Unión Europea para poblaciones de más de 2.000 habitantes, además de estar sancionados por las distintas confederaciones hidrográficas por incumplimiento en el tratamiento de sus vertidos.
Dichas depuradoras estaban previsto materializarse, pero el gabinete Cospedal las paralizó. Así, por fin será una realidad las estaciones de tratamientos de agua de Yunclillos, Lomincar, Recas, Gálvez, Buenaventura, Cervera de los Montes, La Hinojosa de San Vicente, Montesclaros, Navamorcuende, La Puebla de Almoradiel, Villa de Don Fadrique, Villanueva de Alcardete, El Toboso, La Guardia, Yepes y Ciruelos.
