La VII edición de ‘A todo color’ representó un nuevo éxito de creatividad y solidaridad.
Y es que la iniciativa de la empresa talaverana Max Color. Pintura & Decoración sigue calando hondo y ganando adeptos.
‘A todo color’ volvió a congregar a un buen número de artistas urbanos y de niños, que a través de los talleres propuestos, tomaron contacto con esta expresión artística que va más allá de un simple grafiti.
Un evento colaborativo donde cada cual pone lo mejor de sí mismo en una jornada de compañerismo, cultura, arte y solidaridad que pudo vivirse en las dependencia de esta emblemática fábrica de pinturas de Talavera, sita en la calle Santos Mártires.
Allí, se continuó con el trabajo comenzado años atrás de engalanar con atrayentes grafitis sus paredes, escaleras y puertas, y donde reconocidos artistas del arte urbano volvieron a dejar su sello.
Los Fumomiles, Bires, Chais, Clara Deguines, Monsieur Muflon, Sukha, Ricardo Fernández o Ramírez llenaron de color un almacén que se ha convertido en una obra de arte.
Solidaridad
Para redondear el encuentro, lo recaudado con la venta de los botes de espray se destina a una causa solidaria.
Como en la edición del año pasado fue la Asociación Criasol, a la que se le donaron los 540 euros conseguidos para que pueda continuar con su labor de apoyo social, logístico y emocional a familias monomarentales y monoparentales de Talavera y comarca.
Un mercadillo de artesanía, música y degustaciones completaron una oferta variopinta que Max Color intentará mejorar aún más si cabe en la octava edición.
Por último, cabe destacar la presencia de los concejales de Protección Social y Reducción de la Desigualdad, Nuria Sánchez, y de Juventud e Infancia, Daniel Tito, en un gesto más de apoyo a la cultura solidaria y la formación en valores promovidas en Talavera de la Reina.