Los trabajadores de las plantas de ‘Hermi-Carne de conejo’ de Torrijos (Toledo) se han desplazado hoy a Cistérniga (Valladolid), donde su empresa tiene su sede central, para expresar su protesta por la decisión del holding cárnico de cerrar el centro de trabajo y despedir a la plantilla.
Los manifestantes, con una pancarta pidiendo “No al cierre de Torrijos”, se han concentrado durante dos horas ante las puertas de su empresa, con un frío polar, bajo la lluvia, la nieve y la aguanieve. Pero ni siquiera han conseguido que algún directivo de Hermi se dignara a recibirles y escucharles.
Hermi cierra el próximo martes la negociación de los EREs con los que pretende despedir a los 21 trabajadores de Torrijos. Será la sexta y última reunión, poque la empresa se ha negado tanto a convocar otra el lunes como a prolongar el periodo de negociaciones.
Ángel Mora, secretario general de CCOO-Industria de Toledo, ha recordado que “ni estamos de acuerdo con las razones ‘organizativas y técnicas’ que alega la empresa para los cierres, aprovechando las facilidades de la reforma laboral del PP; ni mucho menos con las condiciones en las que quiere despedir a los trabajadores”, y avanzó que “o mucho cambia la propuesta con la que venga la empresa a la reunión del próximo martes, o el ERE no llevará nuestra firma”.
