El Colegio ‘Santa María Magdalena’ de Garciotum, municipio de la comarca de Talavera enclavado en la Sierra de San Vicente, se ha ganado a pulso ser uno de los grandes referentes en la defensa y consolidación de la escuela rural en la región.
Atrás quedó aquel atropello del curso 2012/13 cuando el Gobierno de María Dolores Cospedal decretó su cierre porque a sus aulas acudían diez alumnos y no once, como fijó, discrecionalmente, ese Ejecutivo que dijo defender la Educación Pública y al que tres años después el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha le desdijo y sacó los colores. El daño ya estaba hecho, o no.
Pues no, porque Garciotum se asemeja a ese reducto de la Galia de Asterix y Obelix que brillantemente plasmaron Uderzo y Goscinny y que en la realidad personifica su alcalde David Palomares, defensor a ultranza de que su municipio tenga un colegio, algo indispensable para frenar la despoblación y el abandono de los pequeños núcleos rurales.
Atrayentes subvenciones
Y tras sacarse de la chistera dos convocatorias consecutivas de subvenciones municipales para ayudas al alquiler de vivienda y para libros de texto, cuyos destinatarios serían familias con hijos en edad escolar que se empadronaran en el pueblo, ha logrado mantener un ratio de 14 alumnos en los dos últimos cursos, tras los traslados de cuatro familias desde Talavera de la Reina, Cervera de los Montes, León y Tarragona que cumplían esos condicionantes y requisitos.
Su determinación y lucha no quedó ahí, porque no fue suficiente que en el curso 2015/16 el Gobierno de Emiliano García-Page en su política de reconstrucción de la Educación Pública y defensa de los Centros Rurales Agrupados (CRA) reabriera las aulas, sino que éstas deberían dispensar un mínimo confort para los alumnos.
Y así logró que la Consejería de Educación valorase y premiase su esfuerzo reivindicativo primero y atendiera a sus demandas después, demandas que se han plasmado en los trabajos de adecuación de la zona del patio y de juegos, la sustitución de las ventanas antiguas por otras de eficiencia energética y la instalación de un portero automático.
El propio Ayuntamiento de Garciotum también ha contribuido teniendo que realizar obras de adecuación para consolidar dos de las aulas de las instalaciones escolares.
Inversiones con fondos ITI
Este martes el delegado provincial de Educación, Cultura y Deportes, José Gutiérrez, ha elogiado todo ese denuedo de Palomares y destacado las “importantes mejoras” tras esa inversión de algo más de 21.000 euros, de los que 16.843,20 euros serán financiados a través de la convocatoria de ayudas de expresiones de interés, del programa de Inversión Territorial Integrada (ITI) adscrita al programa operativo FEDER Castilla-La Mancha 2014-2020, mientras que el Ayuntamiento de Garciotum asumirá el coste restante.
Gutiérrez ha reafirmado la apuesta del Gobierno de Emiliano García-Page por proporcionar los servicios públicos esenciales en las zonas rurales, entre ellos una educación de calidad, “algo imprescindible para fijar la población de nuestros pueblos”.
Asimismo ha recordado que la actual consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosa Ana Rodríguez, ha anunciado recientemente que el Gobierno regional va a mantener las escuelas rurales con menos de 4 alumnos si se prevé llegar a ese cupo mínimo en el curso próximo”.
Durante su visita el delegado provincial de Educación ha estado acompañado del alcalde Garciotum, David Palomares, y el director del CRA Juan Carlos Sánchez.
Por último, cabe recordar que el colegio ‘Santa María Magdalena’ de Garciotum pasó a integrarse en el curso 2016-2017 en el Colegio Rural Agrupado Tierras de Viriato, al que pertenecen también las localidades de Cardiel de los Montes, Castillo de Bayuela, El Real de San Vicente, Hinojosa de San Vicente y Pelahustán.
